ChatGPT y SEO: ideas para integrar la IA en las estrategias de posicionamiento web

Resumen generado por ChatGPT de las conclusiones de este artículo (no demasiado preciso):

Introducción

ChatGPT (Chat Generative Pre-trained Transformer) es un chatbot creado mediante un modelo de lenguaje conversacional, desarrollado a partir de una variante de la arquitectura GPT-3. El hecho de estar diseñado para procesar el lenguaje natural y generar respuestas coherentes y relevantes para las preguntas de los usuarios (entornos conversacionales), lo convierte en una herramienta interesante para una amplia gama de procesos y sectores, especialmente aquellos relacionados con la generación de contenido. En este post se muestran algunos primeros ejemplos que podrían ser de utilidad para el SEO tras probar la herramienta.

Cómo utilitzar ChatGPT

Para conversar con ChatGPT tan solo es necesario crear una cuenta de usuario en https://beta.openai.com, para lo cual simplemente necesitamos una cuenta de correo electrónico válida. Una vez creada la cuenta e iniciada la sesión, tenemos que dirigirnos a https://chat.openai.com. Aquí podemos iniciar una conversación mediante el cuadro de texto disponible en la parte inferior de la interfaz.

Otra opción para acceder a las funcionalidades de ChatGPT es mediante alguna de las integraciones disponibles en terceras aplicaciones. Más adelante veremos algunos ejemplos prácticos de la integración de ChatGPT con Google Sheets y Google Docs, la aplicación de hojas de cálculo y el procesador de texto integrados en Google Drive. Por el momento, veamos cómo es posible integrarlo con estos servicios. Para ello, seguiremos los siguientes pasos:

1. Abre una hoja de cálculo de Google Sheets tras iniciar sesión en tu cuenta de Google.
2. Dirígete a la opción de menú Extensiones > Complementos > Descargar complementos.
3. Busca el complemento GPT for Sheets and Docs e instálalo. Tendrás que otorgar permisos al complemento para acceder a tus documentos.

   

4. Una vez instalado, ve a Extensiones > GPT for Sheets and Docs > Set API Key
5. Ahora dirígete a https://beta.openai.com, pulsa en tu nombre de usuario (parte superior derecha) y selecciona la opción View API Keys.

   

6. En la siguiente pantalla, pulsa sobre el botón «+ Create new secret key».

   

7. Una vez creada, copia la clave API y engánchala en la ventana que habías dejado abierta en Google Sheets.

   

A partir de ahora ya puedes usar las funciones de ChatGPT en Google Sheets mediante la fórmula =GPT_LIST("pregunta";Celda), en la que «pregunta» es el texto de la pregunta que deseamos realizar al Chatbot y «Celda», la celda de la hoja de cálculo donde se encuentra el argumento o valor. En la siguiente imagen se muestra un ejemplo.

A continuación, se recogen diferentes usos prácticos de la herramienta aplicados a la disciplina del SEO.

Formación

Si todavía no eres un experto en la materia, o desconoces el significado o alcance de algún término especializado del sector, puedes utilizar ChatGPT para resolver esas dudas. A continuación, es posible observar el nivel de precisión y la exhaustividad de las respuestas ofrecidas.

Análisis de palabras clave

Como hemos visto en el apartado «Cómo utilizar ChatGPT», podemos organizar en una hoja de cálculo nuestras palabras clave por tipología (informacional, transaccional, navegacional…). Pero ChatGPT ofrece mucho más que eso en lo relacionado con el trabajo con palabras clave. Por ejemplo, podemos solicitarle una lista de palabras clave long tail y títulos o metadescripciones relacionadas con ellas.

También podemos obtener listas de sinónimos y conceptos relacionados con los que evitar repetir demasiado las palabras clave principales, así como para complementar nuestro texto con términos semánticamente cercanos.

Si tenemos que preparar un contenido y necesitamos saber cuáles son las preguntas más frecuentes relacionadas con esa temática, podemos descubrirlas a través de ChatGPT. En este caso, no obstante, sigo considerando más útil cuando se trabajan productos, el análisis de las preguntas y respuestas en plataformas como Amazon o foros especializados. Además, tampoco tenemos ninguna certeza de que se traten realmente de las preguntas más frecuentes.

Si lo que queremos es analizar un contenido existente, podemos pedirle que nos devuelva las palabras clave con una mayor densidad y el número de apariciones de cada una de ellas.

O podemos pedirle directamente que nos diga cuáles son las palabras clave más importantes de ese mismo artículo.

Generación de contenido

A partir de alguna pregunta solicitando información sobre cualquier tema, ChatGPT nos ofrece un texto original que podemos utilizar como parte del contenido de un artículo.

Si la extensión no es suficiente, podemos complementar ese contenido con preguntas relacionadas con las que generar un nuevo apartado. Las palabras clave relacionadas pueden obtenerse a partir de herramientas como Answer the Public, pero también mediante el mismo ChatGPT.

ChatGPT también funciona bien proponiendo títulos SEO si incluimos en la pregunta, la palabra clave que deseamos posicionar.

También podemos pedirle un texto sobre cualquier temática con una extensión y orientación determinada.

A partir de un texto dado, también podríamos pedirle que lo parafrasease, con el objetivo de conseguir una variante de un texto para no repetirlo, por ejemplo, en fichas de productos muy parecidas. Por otro lado, si queremos escribir nosotros el contenido, pero necesitamos algunas ideas a partir de las cuales organizar el discurso, también podemos acudir a esta herramienta. En el siguiente ejemplo, se utiliza la extensión para Google Docs en lo que podría ser un artículo periodístico.

También podemos pedirle directamente un sumario.

En la redacción de anuncios para Google Ads, también podemos encontrar inspiración:

Schema.org

Otra característica que puede ser interesante en algunas situaciones es el marcado del contenido mediante Schema.org. Como se puede apreciar en la siguiente imagen, si le indicamos con una mínima precisión las propiedades y valores, así como el tipo de contenido, la aplicación es capaz de devolver el código correspondiente.

Si no especificamos la sintaxis, ChatGPT nos devolverá un marcado con microdatos. Pero si le solicitamos expresamente el mismo marcado en formato JSON-LD, también nos lo devolverá, incluyendo además indicaciones sobre cómo podemos integrarlo en nuestra página web.

Analítica digital

Si se te atragantan las expresiones regulares, puedes pedirle que las construya para ti.

Si tienes el mismo problema con las fórmulas de Excel, también puedes recurrir a esta herramienta, aunque en las pruebas realizadas las fórmulas están en inglés.

También le podemos pedir ayuda con herramientas concretas como Google Tag Manager, aunque, en estos casos, las indicaciones son menos precisas y el formato audiovisual funciona mucho mejor, especialmente para usuarios noveles.

Conclusiones

A pesar de haber utilizado ChatGPT tan sólo unas pocas horas, lo cierto es que las posibilidades observadas y recogidas en este artículo dan buena cuenta de la utilidad de esta herramienta en el marco de la generación de contenido automatizado para un sitio web, así como herramienta de soporte para diferentes tareas relacionadas con el SEO.

Por otro lado, si bien parece que chatGPT tiene capacidad para resolver ciertos problemas complejos, también falla en algunos incluso muy simples. Es importante tener en cuenta también que el principal propósito de la herramienta está en mantener conversaciones naturales y no tanto en proporcionar información precisa, veraz o actualizada. En este sentido, todavía está lejos de ser una alternativa a los buscadores que utilizamos y al acceso a la información a través de sitios web.

Algunos otros aspectos y reflexiones rápidas que derivan de este pequeño experimento son:

• ChatGPT necesita instrucciones muy precisas para devolver respuestas útiles.
• Si trabajamos palabras clave, la herramienta nos proporcionará sinónimos, términos relacionados, textos relevantes, entre otros, pero no conoce la competitividad, tendencias de búsqueda, actualidad, entre otras, exactas, asociadas a esos términos, por lo que debemos complementarlo con otras herramientas SEO para poder llevar a cabo un análisis más preciso.
• En este último sentido, si en algún momento es posible integrar estas tecnologías con datos sociodemográficos de usuarios, de sus historiales de búsqueda, navegación o compra, o los disponibles en el CRM de una empresa, el salto cualitativo puede ser mayúsculo.
• De acuerdo con las directrices de Google, el contenido generado por este tipo de tecnologías es considerado spam. Si bien es cierto que no pueden afirmar tener capacidad para detectarlo fácilmente, sí que han avisado que en caso de detectarse se considerará como tal, cosa que confirmó John Mueller en abril de 2022 (ver fragmento del vídeo a continuación).
• ChatGPT ofrece «buenos» textos informacionales, pero nada nuevo respecto al contenido o conocimiento existente. «Tan solo», una versión más. En este sentido, el valor de la opinión humana todavía marca y marcará la diferencia.
• No obstante, el futuro de los redactores SEO noveles y de los «malos» copywritters, responsables del contenido de páginas de poco valor, descripciones de productos mecánicas con cero valor añadido, etc., corre peligro. Su subsistencia depende de su capacidad de adaptación constante a estas innovaciones que se irán sucediendo, y qué valor añadido pueden aportar que estas no sean capaces de alcanzar en cada nueva versión: conocimiento en profundidad del producto, de clientes concretos, del sector, la capacidad para observar y analizar a la competencia o incluso la gestión de la parte más emocional.
• Frente al ejercicio de consultar tres o cuatro sitios web (o muchos más si la temática es sensible) para obtener información y decidir algo en base a ello, la respuesta de ChatGPT es mucho más oscura, porque sólo da una visión de esa cuestión y no cita la fuente a partir de la cual ha elaborado esa respuesta. Esto es algo que puede crear una mayor desconfianza en los usuarios, si bien es cierto que los sitios web tampoco están a salvo de ello, especialmente cuando se observa una clara intención comercial tras su contenido. En cualquier caso, tampoco podemos obviar el valor del contenido generado por personas. El éxito de plataformas como YouTube, Twitter o TikTok se basa en parte en la confianza en unos creadores de contenido concretos con unas opiniones, ideologías, etc., que se han erigido en referentes, modelos o personas en las que confiar y que, desde hace muchos años, han pasado por encima en este sentido a las marcas. Una clara diferencia entre el contenido generado por estas herramientas y el elaborado por las personas serán las firmas. Es decir, un contenido perfecto generado por una inteligencia artificial, frente a un contenido (que puede ser incluso peor), pero firmado por una persona concreta, con nombres y apellidos en la que los usuarios confíen.
• En cuanto a la información de actualidad, puede pasar un poco lo mismo. Si se trata de obtener datos objetivos sobre un suceso, estas herramientas pueden marcar la diferencia, pero hasta qué punto pueden substituir la opinión de los expertos, el acceso directo a los implicados o las interacciones que se producen entre personas con ideas dispares en las redes sociales.
• En las compras, la confianza y la decisión final (más allá del precio y el conocimiento y confianza a través de la experiencia en una marca), seguirá recayendo en gran medida en las reseñas, opiniones y puntuaciones dadas por los usuarios, por lo que, si bien estas tecnologías pueden generar textos orientados al clic y a la conversión, no marcarán una diferencia respecto a lo que hoy tenemos más allá de la automatización y eficiencia en el tiempo necesario para crear todo ese contenido.
• La información y el contenido quizá dejarán de tener valor (porque se pueden autogenerar), por lo que la necesidad de expertos, personas extremadamente conocedoras de una temática, disciplina, sector o producto aumentará y será lo que realmente justifique la necesidad de profesionales que quizá hoy están más centrados en la redacción del contenido. Quizá derive hacia un perfil más centrado en la revisión de estos textos o, incluso, especializado en el uso y explotación de estas tecnologías para poder sacarles todo su partido cuando pasen a ser de pago (algo claramente previsible).
• Todo contenido autogenerado debería revisarse antes de publicarse, especialmente en sectores sensibles. No obstante, los sitios con contenido autogenerado que ya existen desde hace muchos años verán en esta herramienta una posible oportunidad como alternativa para seguir incrementando la eficiencia de su modelo de negocio.
• Respecto al futuro del SEO, la forma en la que buscamos información sí que puede virar de los buscadores actuales, hacía este tipo de tecnologías más directas y eficientes (requieren de menos tiempo y esfuerzo por parte del usuario). De hecho, el mismo Google lleva años experimentando en su SERP con respuestas directas (letras de canciones, direct answers, etc.). Aquí podríamos hablar, por tanto, de una evolución del SEO (optimización en motores de búsqueda) a algo como el AIO (optimización en sistemas de inteligencia artificial), siempre y cuando este tipo de herramientas ofreciesen junto a sus respuestas, la fuente/s de información a partir de las cuales las han elaborado y los usuarios pudieran acceder a ellas.
• La futura integración de ChatGPT en Bing implicará cambios en la SERP de Google, que tendrá que decidir como adapta servicios como Google Ads en estas nuevas páginas de resultados.
• El éxito de las búsquedas por voz (todavía muy lejos de las búsquedas tradicionales, pero en crecimiento) también plantean la duda de si seguirán siendo necesarias las páginas de resultados o si la interacción en torno a intenciones de búsqueda informacionales o de «visitar en persona» (por ej., dónde está la farmacia más cercana) prescindirán totalmente de ellas.
• Otro cambio de paradigma en cuanto a una posible evolución de las páginas de resultados a respuestas directas ofrecidas por un chat, está en un cambio de modelo de negocio por parte de estas empresas, que pasarían de ser puntos de acceso, filtros o facilitadores en el acceso a contenido de terceros, a convertirse en generadores de contenido, con la responsabilidad legal que esto puede implicar.
• Qué parte de estos servicios serán gratuitos y a qué parte o a qué funcionalidades sólo tendremos acceso mediante suscripciones. Los modelos de negocio en torno a estas tecnologías aplicadas a la búsqueda todavía no están claros, al menos, para los que estamos fuera de las grandes compañías del sector.
• Otra duda que plantean es si funcionarán como lo hacen redes sociales como Facebook, Instagram o TikTok, mostrándote sólo lo que quieres ver, las ideas que ya tienes y a la gente que opina como tú, u ofrecerán una mayor diversidad y pluralidad. Lo que hemos podido ver hasta ahora es que el negocio está en tenernos el mayor tiempo posible dentro las plataformas y que esto sólo se consigue cuando todos los parámetros (personas, contenido, opiniones…) son afines a los nuestros. Uno de los grandes dramas de nuestra sociedad actual.